Bueno, ya hemos acabado con estos acontecimientos... la verdad es que ...qué desgaste de energía!!! pero todo ha salido bien, bonito, divertido, entrañable, cansado, movido...
La BODA de JOSE.En Ávila. A priori un problema añadido, pero salvable. El Acostao se vino con nosotros. Y casi no llegamos, no por él...sino por todo, la niña, la toma, que si plánchame esto, que si dame lo otro...en fin, qué contar que no nos podamos imaginar.
Pero llegamos.
La niña una bendita. Ni se inmutó. Cuando protestó un poco le "endiñamos" un bibe y cayó como en un sueño largo y profundo, Morfeo estuvo allí con ella para ayudarla cuando algunos invitados del convite hicieron sonar palmas, pitos y estruendos varios y la pompi tan campante.

Como una campeona, presidiendo la mesa.
Estuvo bien, comimos bien, un poco cargado el ambiente pero divertido,nos reencontramos con amigos que hacía mucho que no veíamos y alucinaron con la peke.

Como era la invitada más joven de la fiesta, los novios le hicieron a Lucía la fiesta correspondiente.
Todo fue bien hasta que su padre, al final de la noche, insistió en ir de copas con ella: -"Pero, papá, no ves que soy muy pequeña?"

_"Me molesta mucho la música bakalao tan fuerteeeee, güeeeee, güeeeee!!!!"
Así que nos despedimos un poco antes que los demás de la fiesta y volvimos a Madrid.
El BAUTIZO de LUCÍA.Muy entrañable y emocionante. Muchos nervios por la mañana y a pesar de ellos, dispuestos a disfrutar del día. A todo esto, mis padres estaban aquí, habían venido desde Fuengirola, todo lo hacía mucho más especial.
Pero la pompi triunfó.

Estaba muy linda y se portó...uffff...increíble. Con decir que se durmió a mitad de la ceremonia, una ceremonia muy bonita con el padre Iñaki amenizándola y haciéndola ágil, y no se despertó hasta acabada la cena.
Sentimientos muy tiernos en la Iglesia, miradas de cariño. Luego, la reunión con nuestra gente más especial, evidentemente no estaban todos lo que son pero sí eran todos los que allí se encontraban.
Un día muy,muy especial. Se lo contaremos a Lucía algún día.
La BODA de MARIO.Ayer mismo. Agotador y emocionante. El primer hermano de Javier que se casaba. Había que celebrarlo por todo lo alto. Mucha familia por parte de mi marido no conocía a la pequeña, así que era como una segunda presentación en sociedad.
Mis papis y hermanos también asistieron, estábamos muy arropados.

Quisimos asistir con nuestras mejores galas. Pero la niña volvió a triunfar superando los Hugo Boss y los Roberto Verino, a ella no le hacía falta tanta marca, ni diseño.
Como siempre, las prisas en el momento de salir. Pero llegamos a punto para la ceremonia en la pequeña ermita. La peke estaba un poco revuelta, se acercaba su hora de comer, aun así mantuvo el tipo durante todo el acto. Los novios estaban muy guapos y algo nerviosos.

Ya casados, se fueron a hacer sus fotos y comenzamos el cocktail, la verdad es que todo muy agradable si no hubiese sido porque me mataban los zapatos, algo habitual en acontecimientos de este porte.
Ya en el interior, y tras el bibe de rigor, pudimos cenar y disfrutar del ambiente, bueno, todo es relativo, porque una no deja nunca ya de preocuparse por si el aire está muy fuerte, si hay mucho ruido, si no se duerme, si hay gente fumando, etc, etc...esto es otra historia.
Pues la niña aguantó.
Como ha aguantado todos estos eventos. Como una jabata. Llegó la hora del baile y ahí si que Lucía dormía en fa mayor, incluso me dejó dar unos cuantos "pasos".
Y para dar fe de ello, ahí teneis al padre de la criatura, desfogándose y amenizando la boda esperada de su hermano Mario.
Felicidades a los novios. Y que les dure.