Si, claro que te sentí.
Llegaste a mi inesperadamente. En silencio. No te pude adivinar, ni siquiera te imaginé.
De repente, concentrada en mis quehaceres ordinarios frente al ordenador, a primera hora de la mañana del domingo, te acercaste a mi, y en un solo momento, todo mi mundo tembló.
Me senti desorientada, un poco perdida, sin saber qué hacer. Pensé, ¿habrá sido solo un sueño? será mi imaginación? pero al poco, comprendí que eras real, que estabas aquí conmigo, entre estas cuatro paredes.
Me hiciste estremecer. Y es que fue mi primera vez.
Por favor, no vuelvas nunca.
miércoles, agosto 15, 2007
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4 comentarios:
SE PERFECTAMENTE DE LO QUE HABLAS, ESA SENSACION QUE NOTAS VENIR Y NO SABES LO QUE ES... CUANTO DURARARA? Y EL RUIDO? NO TE LLAMO LA ATENCION? COMO EL PASO DE UN TRAILER POR TU LADO. JAJAJA
EN FIN, UNA INCERTIDUMBRE, QUE CUANDO PASAS RESPIRAS CON ALIVIO. ESPERO QUE NO LO VUELVAS A SENTIR.
BESOS
Hola bicicleta veraniega! por lo que leo, imagino que tú también has tenido alguna experiencia similar...
Yo no escuché nada de ruido, había silencio total, pero al estar concentrada en la pantalla del ordenata cuando pasó, noté muchísimo el temblor y no supe qué hacer, me levanté en seguida y miré las lámparas del salón :-)
Besos.
Por suerte no estaba en madrid cuando sucedió, pero también hubo uno de baja intensidad en Motril hace algunos años que sí me pilló y menudo miedooooo!!!!
La verdad es que es un cague...y eso que son muy flojitos...no me qiero imaginar estos días en Perú...vaya desde aquí un apoyo de LaBurbuja.
Besos.
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